Santa Maria Strela do Dia
Cantiga de loor (CSM nº 100)
(Siglo XIII)
Autor
- Alfonso X el Sabio, rey de Castilla y León (1221 – 1284)
Intérpretes
- Voces: Rosanna Franzese.
- Flautas de pico y bendir: Francisco de Asís Manzanero Osuna.
Montaje y edición
Sevilla (España), 23 de septiembre de 2020.
La obra
Esta célebre pieza, catalogada con el número 100, forma parte de un conjunto de más de cuatrocientos cantos a la Virgen María conocidos como Cantigas de Santa Maria. Se trata de una colección hecha por el rey castellano leonés Alfonso X el Sabio, durante la segunda mitad del siglo XIII. De dicha magna obra se conservan actualmente cuatro códices (libros manuscritos), unos más completos que otros.
Dos de ellos se guardan en el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid, España). Son los llamados Códice Princeps y Códice Rico, célebres porque, además de la música y los textos, contienen más de 2.000 hermosísimas miniaturas que los ilustran. Un tercero está en la Biblioteca Nazionale Centrale di Firenze (Italia) y, por desgracia, sus pautas están vacías de notas musicales. Es el conocido como Códice de Florencia. Y el cuarto, procedente de la Biblioteca Capitular de la Catedral de Toledo (España), se custodia en la Biblioteca Nacional de España (Madrid), con la signatura Mss/10069. Es llamado Códice de Toledo. Precisamente a partir de éste último documento (folio 156r), el musicólogo Francisco de Asís Manzanero Osuna ha realizado una transcripción de la pieza a notación musical convencional actual, que ha servido de base a esta interpretación.
Esta magna obra literario-musical, de las más importantes de toda la Edad Media, está formada por una colección de poemas musicados que narran distintas historias que circulaban de boca en boca en las que se manifestaban milagros (miragres) de la Virgen María que incitaban a la devoción. Estos poemas se organizan en grupos de diez, de los que el décimo no narra ningún milagro, sino que realiza una alabanza (loor) a Santa Maria.
El texto
Las Cantigas de Santa Maria están escritas en galaico-portugués medieval. Suelen seguir una estructura métrica que es una variante del zéjel hispano-musulmán, en el que hay unos primeros versos que sirven de estribillo (que riman entre sí) a los que siguen otros con nueva rima que hacen de mudanza o estrofa. Cada estrofa se completa con nuevos versos que riman con los del estribillo.
El texto de la cantiga número 100 es una alabanza a la Virgen María; por lo que es una de las llamadas de loor. Y dice exactamente:
Santa Maria ſtrela do dia.
moſtranos uia pera deus et nos guýa.
Ca véer fazelos errados
que perder foran per pecados
entender de que mui culpados
ſon maiſ per tí ſon perdonados
da ouſadia que eles fazia
fazer folia mais que non deueria.
[…]
Su traducción es aproximadamente:
Santa María, estrella del día,
muéstranos la vía hacia Dios y danos guía.
Pues haces ver a los errados
que se pierden en su gran pecado
y entender que, aunque estén muy culpados,
aún así, por ti son perdonados
de la osadía que les hacía
hacer locuras que nunca deberían.

El texto hace alusión a la Virgen María como estrella y guía. Esto se puede relacionar directamente con la creación, por parte de Alfonso X el Sabio, de la Orden religiosa militar naval de Santa María de España, también llamada Orden de la Estrella (porque tenía como emblema una estrella), que fue la encargada de organizar el llamado fecho de Allende o fecho del Mar, del que hablaremos más adelante.
La forma
La forma musical de esta cantiga es el llamado virelay, una estructura de origen francés muy usada a partir del siglo XIII. En él se alternan un estribillo con estrofas divididas en dos secciones, la primera con nueva música (llamada mudanza) y la segunda con la música del estribillo, pero sobre la que se cantan los versos finales de cada estrofa (llamada vuelta). Como puede comprobarse, poesía en forma de zéjel y música en forma de virelay encajan perfectamente, a pesar de tratarse de estructuras procedentes de culturas tan diferentes como la islámica y la francesa. Y es que el mestizaje cultural siempre da frutos maravillosos como éste.
Es importante señalar que todas las Cantigas de Santa Maria son piezas monódicas, en las que tan sólo aparece escrita una melodía sin ningún tipo de acompañamiento. Sin embargo, por las fuentes documentales sabemos que en este tipo de piezas era habitual añadir una sencilla polifonía improvisada, como la que aparece en esta grabación. Por otra parte, a través de las propias miniaturas que hay en los códices (sobre todo en el Códice Princeps, también llamado de los músicos) sabemos que estas piezas se acompañaban de una enorme variedad de instrumentos musicales.
El autor
Alfonso X el Sabio (1221 – 1284) fue un rey castellano leonés del siglo XIII, hijo del también rey Fernando III el Santo (ca. 1199 – 1252) y de la reina de origen alemán Beatriz de Suabia (1205 – 1235). Entre sus hechos políticos más importantes están la continuación de las campañas de conquista de los reinos musulmanes del sur de España, iniciadas por su padre; e incluso el intento de continuación de dicha conquista hacia África (conocida como fecho de Allende o fecho del Mar). Sin embargo, también fue aspirante al trono del Sacro Imperio Romano Germánico (el llamado fecho del Imperio), que pretendía heredar de su abuelo materno. Así mismo, emprendió importantes reformas económicas y monetarias con gran éxito.
Pero si por algo ha pasado a la historia este rey, ha sido por su inmensa labor cultural, que le valió el sobrenombre de el Sabio. Pues él mismo patrocinó, supervisó y hasta participó personalmente en la elaboración de numerosas obras literarias, científicas, históricas y jurídicas. Para ello contó con la colaboración de un selectísimo conjunto de intelectuales cristianos, musulmanes y judíos, conocido como la Escuela de Traductores de Toledo (institución ya existente antes del advenimiento de este monarca, pero que él potenció muchísimo). Con ello intentó llenar la Corte con todo el saber y el arte de las tres culturas conocidas en su época. Unos de los más hermosos frutos de esa encomiable labor son las Cantigas de Santa Maria, que nos sitúan a Alfonso X el Sabio como uno de los últimos troveros medievales.
Los troveros
Los troveros eran personajes de la nobleza medieval, por tanto con buena formación cultural, que se dedicaban profesionalmente a la composición de canciones profanas en lengua vernácula (no en latín). Fueron herederos culturales de una tradición más antigua, nacida con los celebérrimos trovadores del sur de Francia, que escribían en occitano o provenzal (lengua d’oc). Los troveros, en cambio, escribían en francés antiguo (lengua d’oil), la lengua del norte de Francia. Por extensión, se suele llamar también troveros a los que escribían en otras lenguas vernáculas, como el galaico-portugués; aunque a veces se les cite como trovadores, lo que puede genera cierta confusión . La temática principal de estos repertorios era el amor cortés del un caballero hacia una dama. En el caso de Alfonso X el Sabio, la temática es religiosa mariana, pero el tratamiento es similar al del amor cortés.

Curiosidades
Las imágenes
Todas las imágenes que aparecen el en vídeo son miniaturas extraídas de los distintos códices de las Cantigas de Santa Maria. Se les llama miniaturas, no porque sean pequeñas, sino porque se pintaban sobre una base de minio (óxido de plomo de color rojizo), un pigmento muy usado en la Edad Media.
Sólo la última imagen no pertenece a las miniaturas de las Cantigas de Santa Maria. Se trata de una fotografía de Nuestra Señora de los Reyes, patrona de la Archidiócesis de Sevilla; una imagen del siglo XIII tallada en madera policromada y de vestir que se venera en la Capilla Real de la Catedral de Santa María de la Sede, de Sevilla (España). Y es que, como anécdota curiosa, es tradición que en la misa que cada 15 de agosto se hace en honor de esta veneradísima imagen, la lectura del Salmo se sustituya por esta cantiga de loor: Santa Maria Strela do Dia. No en vano uno de los códices hoy custodiado en el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial se conservó durante siglos en la Catedral Hispalense.

Los intérpretes
Los intérpretes de esta versión de la cantiga de loor, Santa Maria Strela do Dia, son sólo dos músicos que han grabado un total de dos voces y cuatro instrumentos.
Rosanna Franzese ha realizado la melodía original y una segunda voz improvisada siguiendo las costumbres de la época.
Francisco de Asís Manzanero Osuna ha grabado hasta tres voces con flautas de pico (la melodía original y dos voces improvisadas al estilo del siglo XIII) y un acompañamiento rítmico con un instrumento llamado bendir, que es un pandero de origen árabe caracterizado por llevar por detrás unos bordones o cuerdas tensas que le dan su característico brillo y viveza.

